Las dos veces que he visitado México he pasado por el estado de Guanajuato. Y, si te digo la verdad, volvería cada año si pudiera. Este estado relativamente poco turístico del país azteca tiene todos los ingredientes necesarios para convertir cada viaje en una experiencia sencillamente maravillosa: campos de agave, ciudades patrimonio de la humanidad, pueblos mágicos, una gastronomía excelente y una gente tan cálida, amable y maravillosa que te sentirás en casa desde el primer minuto.
Cuando pensamos en viajar a México la mayoría sueña con las playas turquesa de la Ribera Maya. Otros suspiran por el rico patrimonio arqueológico que mayas, aztecas y olmecas dejaron por todo el país. Algunos imaginan la costa del Pacífico y otros cuantos salivan pensando en los tacos, las enchiladas, las gorditas y todas las cosas ricas que se pueden comer en México. Pero México es mucho más que estas cosas y estos lugares. Y tiene mucho más por ofrecer que los rincones a los que va todo el mundo.

El estado de Guanajuato, a unos 300 kilómetros de Ciudad de México, es un destino redondo. Y si no me crees… Pues bien, te voy a contar por qué me gusta tanto y por qué creo que deberías meterlo en tu lista de lugares por descubrir en Guanajuato. Estas son mis 11 razones para visitar Guanajuato.
11 motivos para visitar Guanajuato
1. Guanajuato es un estado seguro
La primera en la frente. Guanajuato es un estado seguro. Y punto.
Sí, ya sé que has visto en televisión, has leído y te han contado que México es un país inseguro, que hay violencia, que te pueden secuestrar, que te pueden “pasar cosas”. Pero déjame que te diga algo, los medios sólo te están contando una parte de la historia.
He estado en Guanajuato dos veces. La primera en 2010 y la última en noviembre de 2017. En una ocasión fui por libre y la otra en un viaje con otros blogueros. En la primera visité a la familia de Giovanna, una de mis mejores amigas y compañeras de viajes (juntas hemos estado en Japón, las Islas Órcadas de Escocia, Malta y Jordania). En la segunda me llevaron de un lado a otro pero también pude interactuar y conocer a gente local. Y nunca, ni en una sola ocasión, tuve la sensación de que Guanajuato fuera un lugar peligroso. Todo lo contrario.

Como me dijo el papá de Giovanna, el profesor Cruz Araujo: “En Guanajuato nunca pasa nada malo”. Y es cierto. Seguro que hay problemas (como los tiene Barcelona con los carteristas o el Reino Unido con los borrachos), pero si aplicas el sentido común podrás descubrir que los guanajuatenses son lo más y que no te va a pasar nada.
Por si todavía no me crees, que sepas que el Ministerio de Asuntos Exteriores de España avisa de que “se recomienda viajar con precaución y abstenerse de hacerlo por determinadas zonas”. Dicho esto, este organismo español tiene en su página web una lista de las zonas peligrosas, las zonas de riesgo medio y las zonas sin problemas, entre las que se encuentra el estado de Guanajuato. Tienes mucha más información útil en la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores de España.
Eso sí, al ser un país de fuera de la Unión Europea viaja con un seguro de viaje, que nunca se sabe y si tienes algún problema de salud lo agradecerás.
Y, como siempre, aplica el sentido común y actúa con cabeza. Si en Madrid o Barcelona no te meterías por un callejón oscuro por la noche, tampoco lo hagas en México.
2. La hospitalidad de su gente
Si visitas Guanajuato te encontrarás con un montón de gente maravillosa que adora su tierra y que te recibe con una sonrisa y con la hospitalidad de quien te conoce desde hace mucho tiempo. Los guanajuatenses son cálidos, amables, curiosos y siempre tienen buenas palabras para su tierra y para los que, como yo, se enamoran de ella.


En mi primer viaje a Guanajuato tuve la gran suerte de poder vivir el destino como un local gracias a la familia de mi amiga. Sus padres cocinaron comida tradicional, charlamos muchas horas, ella me descubrió las calles de la ciudad de Guanajuato y su hermano (Uriel, ahí va un saludo para ti) me sacó de fiesta con sus amigos, como si hiciera una vida que nos conocíamos.
En el segundo, los papás Araujo se acercaron a la ciudad de Guanajuato sólo para verme y pasar unas horas juntos. Don Jesús nos llevó a todas partes en la minivan de Turismo de Guanajuato y se comportó como el anfitrión perfecto. No podría haber tenido mejor cicerone que Daniel, también de Turismo de Guanajuato. Él se encargó de que estuviera cómoda, de que no me perdiera en la ruta en cuatrimoto por la sierra y de que no diera un paso en falso en las minas de Mineral de Pozos. Un encanto de persona. Recuerdo la callejoneada con la estudiantina y Jorge. O la cena en León con Adriana. Los voluntarios del Festival Internacional del Globo de León. Los locales que nos ayudaron a bajar el globo de donde lo dejamos y con los que nos echamos unas risas. También recuerdo la charla por la noche con un charro, mientras las estrellas brillaban sobre Mineral de Pozos. O la amabilidad de la familia que lleva el hotel ecológico donde nos quedamos en medio de la nada. Y la simpatía de la guía que nos llevó de ruta del tequila. Y las sonrisas de las mujeres que nos cocinaron uno de los platos típicos de la región. ¿Hace falta que siga?

Pues eso, los mexicanos son muy chidos. Pero los guanajuatenses más.
3. La Gastronomía de Guanajuato
México es un país donde todo tiene color, desde los edificios hasta todos y cada uno de sus platos. Desde la primera vez que la caté me di cuenta de que la gastronomía mexicana se iba a convertir en mi favorita. Ponme delante unas enchiladas, unos tacos, un buen mole poblano, unas quesadillas, unos huevos rancheros, un guacamole, unas carnitas o una torta ahogada y seré la mujer más feliz del mundo. Y si ya lo riegas con un agua fresca de jamaica ya ni te cuento.

Guanajuato es uno de los estados de México con una variedad gastronómica más rica gracias a la fusión de ingredientes españoles y prehispánicos. Los guanajuatenses adoran comer y están muy orgullosos de sus platillos regionales. No te vayas sin hincarle el diente a unas enchiladas mineras, ni los tamales estilo Guanajuato, con relleno de carne de cerdo o queso ranchero. En San Miguel de Allende tienes que probar las pellizcadas de nata y el fiambre estilo San Miguel de Allende. Irapuato es la capital mundial de las fresas, así que busca un buen lugar para comer fresas cristalizadas o fresas con crema. Por cierto, la bebida típica del estado de Guanajuato es la Cebadina, un agua fresca de cebada a la cual se le agrega bicarbonato de sodio antes de consumirla.
Como ves, a Guanajuato no se va a hacer dieta. Prepara el paladar y pruébalo todo. Tus papilas gustativas te lo agradecerán.

4. Su historia
El estado de Guanajuato no tiene grandes yacimientos arqueológicos ni ruinas mayas o aztecas. Pero esto no quiere decir que le falten atractivos. Visitar Guanajuato es descubrir la tierra de los chupícuaros, los purépechas, los otomíes y los chichimecas. Visitar Guanajuato es adentrarse en el corazón de México y el lugar donde se inició la revolución y la lucha por la independencia. En Dolores Hidalgo el cura Miguel Hidalgo y sus colegas se levantaron en armas contra el régimen virreinal con su Grito de Dolores, el 16 de septiembre de 1810. Visitar Guanajuato es descubrir un estado marcado por la minería y la ruta de la plata. Y un lugar tan fascinante que ni con una visita tendrías suficiente.

5. Patrimonio Minero
La historia del estado de Guanajuato está marcada por la minería desde el mismo instante el que los españoles, en el siglo XVI, descubren la famosa veta madre de Guanajuato, que corre a lo largo de los cerros y deja en la superficie una miríada de minas, tiros y bocaminas. Aunque la mayoría ya no están en funcionamiento, muchas de las minas de Guanajuato se pueden visitar y permiten descubrir más sobre esta industria que le dio vida a toda la región. Así que ya lo sabes, si visitas Guanajuato acércate a alguna de las minas. La experiencia lo vale.

6. La ciudad de Guanajuato
Con sus casas de colores, su perfil sobre la colina y una trama de callejones y túneles que prenden la llama de la imaginación, ver la ciudad de Guanajuato es uno de los mejores motivos para visitar México que se me ocurren.
Guanajuato tiene todo lo que cualquier viajero querría: color, luz, rincones bonitos y una gente de 10. Pasear es la mejor manera de descubrir su centro histórico, que está lleno de edificios tan bonitos como el Teatro Juárez, la catedral, la universidad de Guanajuato o el mercado. Los amantes de la historia vibrarán con la Alhóndiga de Granaditas y las vistas desde lo alto del monumento al Pípila. Y los más aventureros y atrevidos pueden explorar la sierra y los túneles de Guanajuato en cuatrimoto o acercarse a ver las momias. Para los románticos y musicales creo que no hay nada mejor que participar en una callejoneada por los callejones de Guanajuato con la Estudiantina. Te harán bailar, cantar y reír a partes iguales. Y acabarás en el callejón del Beso, uno de los más lindos de toda la ciudad. En serio, ¿todavía tienes dudas?


7. Sus ciudades patrimonio de la Humanidad
Guanajuato es el corazón de México y tiene dos ciudades Patrimonio de la Humanidad: Guanajuato y San Miguel de Allende. Ambas se han ganado esta distinción a pulso gracias a su colorida arquitectura colonial, su historia y la autenticidad que se respira en ellas. Yo, que he tenido la suerte de explorarlas las dos, te recomiendo que les dediques unos cuantos días si quieres empaparte de todos sus encantos.
Guanajuato destaca por su pasado minero, sus calles subterráneas y túneles, su arquitectura barroca y neoclásica, por sus casas de colores, sus callejones y su peso en la historia de México. Mientras que San Miguel de Allende es una joya del barroco mexicano con algunos de los edificios más bonitos de todo el país. San Miguel fue un crisol de culturas y hoy es una de las ciudades más bonitas de todo México.


8. Sus pueblos mágicos
En el estado de Guanajuato la magia es real. Y si no, visita sus pueblos mágicos y compruébalo por ti mismo. Dolores Hidalgo, Mineral de Pozos, Salvatierra, Jalpa de Cánovas de Purísima del Rincón y Yuriria son los cinco pueblos mágicos que alberga Guanajuato. Poner un pie en ellos es una experiencia tan única y maravillosa que no podrás olvidarla.

Dolores Hidalgo es la cuna de la independencia nacional y es famoso por su cerámica de Talavera, los sabores de sus helados y la música de José Alfredo Jiménez, uno de sus hijos más ilustres.
Mineral de Pozos fue un pueblo fantasma y todavía hoy las ruinas de sus minas y sus casas le dan un aire etéreo que haría temblar al corazón más duro. Hoy está lleno de pequeños hoteles boutique, tiendas encantadoras y una autenticidad magnífica.

A su turno, Salvatierra es una de esas ciudades coloniales que no dejan indiferente. Fundada por los españoles en 1644, está llena de iglesias y conventos de la época del virreinato.
Jalpa de Cánovas es una antigua hacienda y un pueblo pintoresco lleno de tranquilidad y color donde se respira lo que es un auténtico pueblo mexicano. Está bastante cerca de León y es perfecto para una excursión de un día.
Yuriria es, como Salvatierra, un lugar marcado por la arquitectura colonial de sus templos y conventos y un entorno natural precioso. Descubre su laguna, sus monumentos y los restos de la cultura indígena local.
Si tienes tiempo, no te pierdas ni uno de los 5 pueblos mágicos de Guanajuato.

9. Su tequila y su mezcal
¿Creías que el tequila sólo se producía en la región de Tequila, en Jalisco? Pues no. Aunque esta zona de México es la que se lleva toda la fama tequilera, la bebida nacional se produce en otros lugares del país. Y Guanajuato es uno de ellos.
La mayoría de bodegas tequileras que dan forma al Circuito del Tequila en Guanajuato están al suroeste del estado y están protegidas por el sello de la denominación de origen. Verás campos de agave azul y podrás descubrir haciendas antiguas donde la historia y esta bebida se unen. Yo pude visitar el rancho El Coyote, la ciudad de Pénjamo y la Tequilera Corralejo y me dejé mucho más por ver y por catar.
Y si todavía quieres más, en Guanajuato también puedes hacer la ruta del Mezcal. La comunidad mezcalera de San Felipe es el lugar perfecto para empezar.

10. La ciudad de León
Quizás no tenga la monumentalidad de sus vecinas Guanajuato, San Miguel de Allende o Dolores Hidalgo. Y quizás no tenga la magia de pueblos como Mineral de Pozos. Pero lo cierto es que la ciudad de León bien vale una visita.
León es una de las grandes urbes del estado de Guanajuato y, como tal, es una gran ciudad con mucho por ver y con más por hacer. Tienen una zona cultural junto a la universidad donde los museos, los teatros y la literatura son protagonistas. Sin olvidar su coqueto centro histórico con una catedral bellísima, plazas en las que uno querría quedarse a ver pasar el tiempo y muchísima vida. Además, León es la capital mundial del calzado y tiene una larga tradición del trabajo de la piel. Para descubrir más puedes hacer la conocida “Ruta PiCaSo” y visitar alguno de los muchos ateliers donde todavía se confeccionan zapatos de primerísima calidad a unos precios excelentes.


11. El festival Internacional del Globo de León
Cierra los ojos e imagina miles de globos de todos los colores y las formas posibles sobre el cielo, flotando con elegancia mientras sobrevuelan una ciudad y la llenan de magia. Pues bien, el Festival Internacional del Globo que se celebra en León, Guanajuato, es una experiencia sublime. Y si no me crees pregúntale a cualquiera que lo haya podido ver y vivir en primera persona.
Una cosa es volar en globo por la Garrotxa (Cataluña), descubriendo el paisaje a un ritmo pausado. Y otra es vivir un evento de tamaña magnitud como el Festival Internacional del Globo de León. Esta última es una experiencia casi religiosa en la que las retinas se te llenarán de magia y de la que no querrás despertar. Si lo ves desde tierra, la visión de los globos flotando sobre el agua es difícil de olvidar. Y si tienes la suerte de vivirlo y verlo desde uno de los globos, entonces ya sí que no lo olvidarás en la vida.

Si estás por la zona en noviembre, hazte con entradas, madruga y acércate al parque para ver cómo los inflan en la oscuridad e iluminan la noche, cómo alzan el vuelo con las primeras luces del alba y surcan los cielos sobre León. Y vuelve al atardecer para vivir una noche mágica. No digas que no te lo advertí.
Por cierto, si todavía tienes dudas para visitar Guanajuato échale un vistazo a este vídeo increíble de mi amigo Rubén, de Rubén y el Mundo.
¿Te he convencido para visitar Guanajuato? Si tienes algún otro motivo para descubrir este estado mágico de México, deja un comentario y cuéntamelo. ¡Cualquier excusa es buena para volver.
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*Visité el estado de Guanajuato en noviembre de 2017 gracias a un viaje de prensa de Turismo de Guanajuato. Desde aquí, mil gracias por permitirme volver a uno de mis lugares favoritos. Eso sí, como siempre, todas las opiniones vertidas en este artículo son 100% honestas y únicamente mías.
12 comentarios en “11 razones para visitar el estado de Guanajuato, México”
Precioso todo el articulo, no me extraña que le haya gustado a Gio, las fotos muy bonitas y todo con mucho colorido,ya veo que te lo pasaste de maravilla.
Muchas gracias, Carmen 😉 Me alegro muchísimo de que te haya gustado.. Y ya sabes, ojalá algún día puedas visitar Guanajuato 😉
Gracias por compartir parte de nuestra tierra, un abrazo , el saludo de regreso .. Uriel
Gracias a ti y a tu familia por ser tan geniales y por hacerme sentir como en casa. ¡Os adoro!
Un abrazo grande
Eres una persona MARAVILLOSA en tu sentir y amar nuestra tierra Guanajuato,
México, con que elocuencia, cariño y amor expiras en la redacción de tan bellas palabras salen de tu corazón. Mil gracias Patricia Cuni y Dios Te Bendiga hoy y siempre a ti y a toda tu familia y seres a quienes amas.
Tere, Giovis, Ury y Cruz
Vosotros sí que soys maravillosos, Cruz y Tere (y Uriel y Giovis, por supuesto). Desde el primer momento me tratasteis como si fuera de la familia y eso es algo difícil de olvidar. Amo a vuestra tierra, pero más a vosotros.
Ojalá pueda volver pronto. Y mis mejores deseos para vuestra maravilosa familia.
Un abrazo grande,
Patrícia
Esta increíble la pagina y todos los puntos que mencionas del por que visitar Guanajuato y ademas es muy extensa la explicación 😀
Muchas gracias por tu comentario, Rich 😉
Por cierto, dejar enlaces en comentarios no cuenta como backlink a ojos de Google.
Hola
He tenido la oportunidad de visitar Mexico en 2 ocasiones, la primera vez hice un recorrido con dos amigas de mas de 900 km desde el DF hasta Jalisco- Ciudad Tequila- alquilamos un vehiculo y nos divertimos mucho recorriendo lugares emblematicos como Morelia, Guanajuato, San Miguel de Allende, Guadalajara y Jalisco; y tengo grabados solo buenos recuerdos de todos esos lugares. Mexico enamora con su gastronomia, su gente y su creatividad en artesanias, son ciudades muy coloridas ❤️
Gracias por traer a mi memoria tan gratos momentos
Saludos desde Costa Rica
Muchisimas gracias por tus palabras, Roberto. Todo Mexico es una maravilla. Yo tambien he estado dos veces y siempre vuelvo maravillada. Como bien dices, lo tiene todo: gente, gastronomia, historia, cultura, artesania y sobre todo muchisima vida.
Un abrazo desde Edimburgo,
Patricia
Que bellas palabras para describir Guanajuato!!!
Tengo más de 20 años viviendo en la CDMX y, nunca dejo de añorar todo lo que tenemos en el estado, desde sus sitios conocidos hasta los que poco a poco han ido creciendo.
Cada municipio es único y especial.
Orgullosa Guanajuatense con raíces guerrerenses. Saludos.
Mil gracias por tus palabras, Dalia. Solo he estado en el estado de Guanajuato dos veces pero volveria mil mas… Y bueno, Ciudad de Mexico es maravillosa tambien. Mexico es un pais increible.
Un abrazo desde Edimburgo
Patricia