¿Quién no ha soñado nunca con dormir en un castillo? Que levante la mano, porque uno de mis sueños (además de montar en globo, y eso ya lo cumplí) desde pequeña era precisamente pasar una noche entre los gruesos muros de una fortaleza, durmiendo como una reina o una princesa medieval. Así que, ya que vivo en Escocia, aproveché recientemente para escaparme a la Carberry Tower, uno de los castillos-hotel que hay a las afueras de Edimburgo, para convertir en realidad este deseo. ¿Me acompañas?

A poco menos de 1 hora de Edimburgo en transporte público se alza este castillo baronial cerca del cual la reina María de los Escoceses se rindió ante un ejército en 1567. La Carberry Tower es una fortaleza espectacular ubicada en 35 acres de terrenos pintorescos con bosques y campos en los que es fácil sentirse como un rey (o una reina). Si alguna vez te has planteado cómo es eso de dormir en un castillo en Escocia sigue leyendo, porque te voy a contar mi experiencia.

Dormir en un castillo en Escocia
La llegada a este castillo-hotel a las afueras de Edimburgo se hace a través de una gran avenida que culmina en la entrada de la fortaleza. Una vez dentro, la decoración no es excesivamente viejuna (algo que he visto por estos lares en más de una ocasión). Sus dueños han sabido fusionar muy bien un estilo clásico con el confort… y lo contemporáneo. Mi habitación, que daba a la rosaleda del jardín, era impresionante. Imposible no dejarse llevar… aunque sea por unos momentos. Creo que no hace falta decir que dormí estupendamente.
De entre todas las salas que hay en Carberry Tower, la más espectacular es su biblioteca. Hileras e hileras de estanterías de madera llenas de volúmenes, sofás comodísimos, butacas dignas de un lord, unos tapices por aquí, unas vidrieras por allá… Ideal para llevarte un libro y sentarte unas cuantas horas a disfrutar de la lectura mientras fuera cae la lluvia.
Pese a lo bonito del interior, vale la pena dar un paseo por los jardines de la Carberry Tower. Sus árboles, las flores, la tranquilidad que se respiran lo hacen un lugar especialmente relajante. Y una de las mejores maneras de disfrutar de su imponente exterior junto a la rosaleda y el jardín.
La cena se sirve en uno de los grandes salones y el menú estaba riquísimo. Aquí van unas cuantas fotos que dan fe de ello… Aunque el desayuno no es nada especial, el típico bufé libre con las típicas cosas que desayunan los escoceses: salchichas, haggis, judías… Y, por supuesto, con opciones dulces como croissants o tostadas.
Historia de la Carberry Tower
La Carberry Tower se menciona por primera vez en la historia en el siglo XI, cuando el rey David I de Escocia le dio las tierras de “Caerbairin” a los monjes de la Abadía de Dunfermline. A lo largo de los siglos varias familias pasaron por lo que por aquel entonces era una sencilla fortaleza.
En junio de 1567 la reina Mary Queen of Scots se rindió en la colina de Carberry frente a un ejército formado por sus lores, que luego la aprisionaron. Después de la reforma escocesa, en 1587, las tierras y la torre pasaron a manos de la Corona, para cambiar de propietario varias veces e incluso ser testigos del paso de las tropas jacobitas de camino a la batalla de Prestonpans en 1745 hasta que, finalmente, en el siglo XIX, la familia Elphinstone se hizo cargo del castillo. William Elphinstone, el 15º Lord Elphinstone, es el responsable de su aspecto actual. Mientras que su hijo se casó con la hermana de la Reina Madre, motivo por el cual la actual reina y su hermana pasaron aquí momentos de su infancia. En honor a ellas se ha nombrado a las suites.

La Carberry Tower es uno de esos hoteles que hacen posible el sueño de dormir en un castillo en Escocia de muchos amantes de la historia como yo.
¿Cuánto cuesta alojarse en el castillo Carberry Tower?
Pues bien, depende de la temporada, de la habitación y de si encuentras alguna oferta o no. El precio de una de sus habitaciones más sencillas (para 2 personas) es de 119£ pero en páginas web como Groupon puedes encontrar paquetes interesantes que, por poco más, te incluyen la cena y el desayuno. Yo, por ejemplo, pagué 129£ por una noche, además de las dos comidas. Sigue sin ser barato… Pero de vez en cuando está bien darse un capricho.
Cómo llegar a la Carberry Tower desde Edimburgo:
- En coche: es la manera más cómoda, pero no la única
- En tren: Desde Edimburgo, toma el tren hasta Wallyford y desde allí toma un taxi (5 minutos) o anda hasta la Torre. Tardarás unos 20 minutos a pie, más o menos. Échale un vistazo a los horarios en la web de Scotrail.
- En bus: desde Edimburgo, toma alguno de los buses que van a Musselburgh y desde allí o anda… o toma otro bus. Si hace bueno, el paseo el 100% recomendable. Échale un vistazo a los horarios del bus en la página web de First Buses.
- A pie: aunque es algo cansada, esta la opción que elegí para volver a Edimburgo. A través de senderos perfectamente marcados es posible llegar desde la Carberry Tower hasta el corazón de Edimburgo en unas 3 horas de camino. Si hace bueno, aprovecha y disfruta del paisaje… y de cruzar lugares tan bonitos y con tanta historia como el antiguo túnel de ferrocarril del Innocent Railway, que atraviesa las entrañas del parque de Holyrood.
Información práctica sobre la Carberry Tower
Dirección: Musselburgh, East Lothian, EH21 8PY, Scotland
Correo electrónico: hello@carberrytower.com
Página web oficial: http://www.carberrytower.com/
Teléfono: +44 (0) 330 333 7222
Quizás no sea la experiencia más barata… Pero de vez en cuando está bien darse un capricho para cumplir un sueño, ¿no?