Una de las mejores cosas que se pueden hacer antes o después de visitar la mítica Capilla de Rosslyn es dar una vuelta por el Roslin Glen. Este valle verde, profundo y frondoso oculta un río precioso, las ruinas de un castillo y los restos de varios molinos, además de muchos animales. Hay varias rutas de senderismo, mucho por ver y el desnivel es mínimo. ¡Perfecto para todos los públicos!
El valle de Roslin forma parte del Roslin Glen Country Park, un paraje atravesado por el río Esk junto al precioso pueblo del mismo nombre… y la famosa capilla que Dan Brown inmortalizó en el libro “El Código Da Vinci”. Me habían hablado muy bien de este pequeño paraíso con vistas a las Pentland Hills, así que no pude resistirme a visitarlo aprovechando un día de buen tiempo. Es la mejor decisión que podría haber tomado, y si me haces caso, tú tampoco te arrepentirás de explorar el Roslin Glen. Vamos a descubrir qué ver cerca de Edimburgo.
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Una buena manera de adentrarse en el valle del río Esk en Roslin es dejando atrás la capilla de Rosslyn. Hay que seguir las señales que conducen al Roslin Castle y siempre descender. Se pasa junto a un cementerio y poco a poco la vegetación se apodera del paisaje. Antes de seguir bajando, es una buena idea parar en el castillo, que está a mano izquierda. El río se oye pero no se ve, oculto bajo una frondosa capa de vegetación.
Restos del castillo de Roslin Restos del castillo de Roslin Restos del castillo de Roslin
A pesar de estar en ruinas, el castillo de Roslin es un lugar imponente. Aquí se rodaron las escenas finales de la película “El Código Da Vinci”, sobre el puente de piedra que supera el abismo y conecta un lado del valle con lo que queda de esta fortaleza del siglo XIV. La residencia de los condes de la Orcadas, los Sinclair, fue destruido en 1544, durante el “Cortejo rudo” mediante el cual Enrique VIII quería obligar a los escoceses a prometer a la pequeña Mary Queen of Scots con su hijo Eduardo. Una pequeña parte es habitable y se alquila como residencia de vacaciones. Entre los pocos restos, se conserva parte de la entrada, fragmentos de muros, las ruinas de la torre del homenaje y no mucho más.

El sendero continua bajando por unos escalones de madera, entre robles y abedules. Antes de llegar hasta el fondo del valle, detente bajo el imponente arco del puente que comunica con el castillo de Roslin. Este lugar fue inmortalizado por varios pintores románticos a finales del siglo XVIII y se rumorea que el mismísimo Robert Burns quedó fascinado.

Al este, si andas junto al río Esk, podrás llegar hasta los restos del Castillo de Hawthornden y la Cueva de Wallace</strong rel=»nofollow»>, dos rincones muy interesantes y marcados por la historia. A mi me parece especialmente interesante el entorno en el que un puente cruza el arroyo de forma dramática y que en primavera saca sus mejores colores.
Al oeste, la ruta por el Roslin Glen conduce hasta los restos de varios molinos de pólvora, claves en el desarrollo industrial de la zona. Es difícil perderte, tan sólo sigue el curso del río y te toparás con los restos del más grande de Escocia. Esta factoría produjo pólvora y explosivos para la minería y las canteras locales durante más de 150 años. Además, de Roslin también salió munición para conflictos como las Guerras Napoleónicas, la de Crimea y la I y II Guerra Mundial. Sólo podrás ver las cenizas de lo que un día fue, pero el entorno te absorberá. Es curioso observar cómo los restos de algo que construyó el hombre (y que segó vidas) se fusionan a la perfección con la naturaleza. Y todo esto mientras el río fluye, las hojas crujen bajo tus pies y los pájaros cantan.

Esta ruta tiene unos 5 kilómetros y se puede hacer en 2 o 3 horas, aunque si hace buen día es buena idea llevarte el picnic y sentarte en cualquier rincón para comer o merendar tranquilamente. Hay muy poco desnivel y está bien señalizada.
Si tienes suerte, podrás ver nutrias y muchas aves. La mejor época del año para visitar el Roslin Glen es de abril a julio, cuando las flores lo inundan de color y vida.
Cómo llegar al Roslin Glen:
- En coche: Roslin está muy cerca de Edimburgo y se puede llegar siguiendo las señales hacia Penicuik o Peebles.
- En taxi: te costará unas 22£
- En bus: Hay muy buen servicio de bus desde Edimburgo al pueblo de Roslin. Son unos 40 minutos de trayecto. Puedes tomar o el bus 15 (el 15A los domingos) de Lothian Buses si vas a salir del centro de Edimburgo; o el bus 40 si sales desde barrios costeros como Portobello o Musselburgh. Puedes consultar los horarios en la página web de Lothian Buses. El billete sencillo cuesta 1’50£.
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3 comentarios en “Excursión por el Roslin Glen, una ruta perfecta junto a la capilla del Código Da Vinci”
En Julio estuvimos en la Rosslyn Chapel pero no hicimos esta excursión. Una lástima porque por lo que cuentas debe ser preciosa. 🙂
Hola Víctor! La mayoría de la gente va a la capilla… y luego se van. Y la verdad es que como bien dices es una lástima. A menos de 15 minutos hay un rincón natural espectacular con un castillo en ruinas, flores y muchísimo por ver… y gratis! La próxima vez no te lo pierdas 😉