En Escocia, la tierra por excelencia del whisky, lo llaman «Uisge Beatha» o «Agua de vida». Quizás porque el agua de sus ríos, filtrada a través de la turba, tiene tonalidades que oscilan entre el dorado y el rojizo. Durante siglos, en destilerías pequeñas y grandes repartidas por todo el territorio pero en especial por las Highlands se ha elaborado con mimo y atención una de las bebidas más preciadas en todo el mundo. Hablar de whisky escocés es hablar de malta, de tonos ocres, de sabor a cereal tostado y azúcar, de años de pasión por un oficio y amor por una tierra de mil matices y siempre bañada por la lluvia.


Creo que a poéticos a los escoceses (más allá de mi parcialidad, de sobras conocida, por esa tierra) no les gana nadie. Si no, ¿por qué llamar a un whisky «El valle del ciervo» que es lo que Glenfiddich significa? Elaborado desde 1886 en la pequeña localidad de Dufftown en el valle de Spey en Escocia, los herederos de William Grant (su fundador) se han encargado de perpetuar la tradición y de llevar el nombre del país a todos los confines de la Tierra. Símbolo de un tiempo, un lugar y fiel a su historia, se «cocina» igual que hace más de un siglo en unos alambiques de cobre con cebada malteada y agua pura y blanda del manantial Robie Dhu, que brota en las colinas de Conval en un paisaje de aquellos que se te quedan grabados a fuego… y más si acompañas la visita con una copa del preciado líquido dorado. Los últimos matices del sabor, su suavidad y el tímido tono áureo se deben al envejecimiento a que se somete al whisky en barricas de roble añejas. La destilería de whisky escocés de malta Glenfiddich es un icono de Escocia y si os gusta el whisky no os podéis perder la visita a su destilería y al valle que la alberga.

Glenfiddich está de enhorabuena estos días y celebra su 125 aniversario renovando la imagen de la marca a través de la iniciativa Glenfiddich Collection 125, que ha retado a los jóvenes artistas a reinterpretar su emblema, el icónico ciervo. En el enlace anterior podéis ver algunas de sus creaciones, bastante espectaculares y sorprendentes, por cierto.
Al recibir la botella de whisky de 12 años no pude evitar salir a la terraza para recordar mi vida en Escocia y buscar junto a casa esos cielos y esos verdes que tanto echo de menos. Recuerdo esos 9 meses como los más intensos de mi vida y desde entonces vuelvo una vez al año por lo menos. Glenfiddich siempre está ahí para recordarme los sabores de mi país favorito tal y como un buen escocés haría, hay que degustarlo lentamente a temperatura ambiente y con un poco de agua, para que los aromas se abran y se fundan en el paladar…

Este post ha sido posible gracias a una acción promocional de Glenfiddich en la plataforma de Blog On Brands. La marca me obsequió con una botella de whisky de malta de 12 años para que les contara mis impresiones. Todas las opiniones vertidas en el post, sin embargo, son únicamente mías y totalmente honestas.
Las fotos de este post han sido realizadas por Roy Lathwell y Benoît Deniaud y usadas por este blog mediante una licencia Creative Commons.
12 comentarios en “Glenfiddich, el «agua de la vida» de Escocia”
Glenfiddich, el «agua de la vida» de Escocia http://t.co/Q8RQHMu21E
Fins i tot a nosaltres ens has transportat per uns moments a Escòcia!!!
No som gaire de whisky, però si del que comporta aquest licor. La tradició d’aquestes terres, l’elaboració… I això que no l’hem trepitjat mai. Però tot arribarà…
Una abraçada.
Manel i Cristina
Exactament… A mi m’agrada més pel que simbolitza que no pas per res mes 😉
El dia que us animeu, I’m here!
Una abraçada
RT @Pot_Still: Glenfiddich, el “agua de la vida” de Escocia http://t.co/9OmcflfPWA
Qué pintaza ese whisky escocés 🙂 A ver si algún día tengo oportunidad de probarlo 😉
Rico rico… ideal para recordar mis días en Escocia y para soñar con mi viaje de este año 😉 Por cierto, si vienes por Barcelona avisa y nos tomamos una copita a la salud del país más bonito y más verde del mundo
Hace muchos años que lo disfruto, no hay nada que se le asemeje y he coleccionado todos los envases de 12 años ha medido que fueron cambiando, los envases cambiaron el contenido no.
Gracias por comentar Hector! La verdad es que es una maravilla y el diseño de los envases muy bonito 😉
Un abrazo
Quina passió i nostàlgia que desprèn aquesta entrada! M’agrada moltíssim, tots tenim aquells racons que ens roben el cor i als quals hem de tornar de tant en tant per recordar, fer balanç… ufff què profunda m’he posat! 😉
Saps aquella sensació de tenir el cor dividit? Doncs a mi em passa això… Suposo que com a tu amb Itàlia, jo he de tornar cada any a Escòcia per retrobar-me amb els racons que em tenen el cor robat 😉
merci per comentar, bonica!
Mad About Memories: #Glenfiddich, el agua de la vida de #Escocia http://t.co/2vUVIDjcXa #whisky #Scotland @blogonbrands
prefiero dalwhinnie, o cardhu, aunque talisker strom está de lujo, ese si que tiene «espíritu» dentro!