Una de las mejores cosas que se pueden hacer en Oban, si os gusta la naturaleza, es escapar a la isla de Kerrera a pasar el día. Situada frente a la costa de esta población de las Highlands, en el estuario de Lorne y a menos de 10 minutos en un ferry de lo más rústico, es un buen lugar para hacer senderismo, explorar castillos y disfrutar de paisajes únicos.
Con apenas unos 30 habitantes humanos y muchas ovejas, Kerrera pertenece al archipiélago de las Hébridas Interiores de Escocia y, como la isla de Handa, es un buen lugar para salir de la ruta turística y descubrir rincones nuevos. Hasta el pasado mes de febrero no sabía de su existencia, así que fue una sorpresa más que grata.
Kerrera vista desde la distancia La isla de Kerrera A punto para embarcar en el ferry de Kerrera
La cuestión es que no me daba tiempo de escaparme a Mull, Iona o Staffa, así que cuando vi la información en la oficina de turismo pensé… ¿por qué no? Y fue un acierto. La experiencia de cruzar a Kerrera en ese ferry vetusto pero sólido con algún senderista más, unos cuantos perros y algún lugareño que volvía a casa con la compra fue memorable. El sol empezaba a bajar, hacía frío… ¡pero era tan bonito!
Llegué a Kerrera sobre las 4 de la tarde, a punto para andar y explorarla. La isla, que una vez perteneció al Clan MacDougall, es hoy un remanso de paz y tranquilidad en el que parece que el tiempo se haya detenido. Verde, fértil y con aroma a turba, es un buen lugar para observar pájaros, para avistar focas (por lo visto les gusta mucho dejarse ver por allí) y para descubrir la historia local. Andando junto a la orilla del mar es fácil toparse con algún barco abandonado. Y en el extremo sur de Kerrera está el castillo de Gylen, una fortaleza medieval que perteneció a los MacDougall de Dunollie y con una historia más que turbulenta.

Foca en Kerrera. Foto de © David Alexander Elder / Flickr


Recorrer la isla de punta a punta supone unas 6 horas de ruta. Pero si sólo queréis hacer la mitad, hay dos rutas senderistas muy interesantes:
- Ruta Sur (3 horas): es la que pasa por el castillo de Gylen, el único salón de té de la isla, sube al punto más alto, cruza por un fuerte de la Edad del Hierro y permite explorar lugares tan sobrecogedores como lo que los lugareños conocen como «las tumbas de los niños». La ruta es circular y está bien señalizada.
- Ruta Norte (3 horas aprox.): aunque el camino no es tan fácil de seguir como en su parte sur, llega hasta el Monumento a Hutchenson y ofrece unas vistas increíbles de Oban y la isla de Mull, entre otros.
Por cuestión de tiempo, sólo pude hacer un tramo de la Ruta Sur pero fue suficiente como para quedarme con ganas de más. Aunque con paisajes como estos… ¿a quién no le pasaría lo mismo?
Quizás por eso volver a tierra firme me costó… El sol se ponía en el horizonte y con el viento en la cara, crucé el pequeño estrecho mientras me hacía la promesa de volver algún día para recorrerla de punta a punta. Estad atentos 😉
Cómo llegar a la isla de Kerrera:
- La mejor manera de llegar a Kerrera es en ferry. En la página web de Kerrera Ferry encontraréis toda la información y los horarios.
- El ferry está a 2 millas al sur de Oban, siguiendo la carretera de la costa.
- Precio: Adultos (3£ ida / 4’50£ ida y vuelta), pasajeros de 5 a 16 años (1£ ida / 2£ ida y vuelta); menores de 5 años gratis. Se pueden subir bicicletas gratis. Los billetes se pueden comprar directamente en el ferry.
- Horarios: En temporada alta suele haber 1 ferry cada media hora de las 9 a las 19h.
Recuerda que también puedes seguir este blog de viajes sobre Escocia en Facebook, Twitter e Instagram si quieres más fotos, rutas, historias y vídeos en directo.
8 comentarios en “Senderismo en Kerrera, una isla frente a Oban”
Fantástico sitio y totalmente desconocido! Nosotros íbamos a ir a pasar el día a Oban, pero no pudimos pillar Ferry y nos decantamos por pasar el día aquí… nos hizo un día espléndido y lo pasamos muy bien paseando y disfrutando de las vistas 🙂
No me extraña nada! YO también me decidí a última hora… y me quedé con ganas de más 😉
Gracias por comentar Oscar!
La verdad que al leer el título de tu post no tenía ni idea de dónde situar la isla, pero merece la pena haberte leído y ver que hay sitios tan bonitos como este!! Genial el blog, te agregamos al nuestro y te esperamos! Un saludo enorme!
Jiji! Es que Escocia tiene muchos rinconcitos ocultos! Me alegro de que os haya gustado. Le echaré un vistazo a vuestro blog seguro 😉
Un abrazo
Gran descubrimiento Patricia. No conocía esta isla para nada. Me alegra haber «caído» aquí y enterarme por fin.
Me alegro de que te parezca interesante! Yo tampoco sabía de la isla de Kerrera hasta que volví a Oban y por falta de tiempo no me pude escapar a Mull… Es una buena alternativa, además de un lugar precioso y muy tranquilo. Y el «viajecito» en ferry «rústico» tiene su encanto 😉
Si vas, ya contarás qué te ha parecido
Tengo una duda, los tiquets para el Ferry los puedo comprar allí en el momento?
Creo que lo pone en el artículo… Pero sí, los billetes para el ferry los puedes comprar allí mismo, directamente al barquero.
¡Te va a encantar!