Tomando como base Loarre y su castillo, la zona de la Hoya de Huesca tiene muchas posibilidades para explorar si te gustan la naturaleza, la historia y la cultura. En el plano natural, este rincón tan especial de Aragón está dominado por unas formaciones geológicas de piedra conglomerada: los mallos.
Moldeados por la erosión a lo largo de milenios, estas moles de sólidas se alzan imponentes, como si fueran los guardianes de la tierra. Los pueblos, situados a sus pies, parecen diminutos y ayudan a dar forma a unos paisajes únicos y, sin dudas, muy especiales. Quizás por eso la zona es conocida por el singular nombre de «El reino de los mallos», porque en el fondo estos gigantes de piedra dormidos puede que algún día despierten y reclamen sus dominios para volver a mojarse los pies en las aguas azul turquesa del río Gállego.
RIGLOS, capital del Reino de los Mallos
Situada al abrigo de estas enormes formaciones pétreas, la pequeña población de Riglos, fue en el siglo XI la capital del breve y aún más pequeño estado que se llamó «El Reino de los Mallos». Según la historia (o la leyenda, no lo tengo muy claro) el rey Pedro I de Aragón regaló en 1097 como dote en el día de su boda a su segunda esposa, la reina Doña Berta. Lamentablemente, el reino desapareció pocos años más tarde, alrededor de 1110.
Llegando por carretera desde Ayerbe hay un mirador fantástico desde el que se puede disfrutar de las vistas del núcleo de Riglos con los mallos a su espalda. Cada uno de estos pilares de piedra tiene un nombre propio y, en conjunto, se han convertido en unparaíso para los amantes de la escalada (entre los que no estoy). Eso sí, hay una ruta circular de varios quilómetros que permite conocer todos los mallos de Riglos y disfrutar de un paisaje muy desconocido que os recomiendo mucho. Todo el esfuerzo se ve recompensado.
El pueblo de Riglos en sí, por comparación con los mallos, parece minúsculo. Es fácil sentirse muy muy pequeño mientras lo exploras y pese a su popularidad como lugar para la escalada, conserva el encanto de aquellos lugares en los que el tiempo parece haberse detenido. Además de los omnipresentes gigantes de piedra, en su núcleo destacan iglesia románica del siglo XI -que antaño fue la capilla del desaparecido monasterio de San Martín- y la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Mallo. Esta última estaba cerrada cuando estuve y no pudimos ver sus dos tallas románicas de la Virgen del Mallo y la de Carcavilla.
Las cimas y paredes de los mallos son el hogar de una importantísima colonia de buitres leonados y otras aves rapaces. Si os gusta la ornitología, no dejéis de pasaros por el Centro de Interpretación de Aves ARCAZ. Disfrutaréis como niños y podréis ver los nidos como si estuvierais allí mismo.
Los mallos de AGÜERO
Aunque algo menos espectaculares que los de Riglos, los mallos de Agüero no desmerecen a sus vecinos. Una vez más, las vistas desde la carretera son espectaculares.
Si tenéis tiempo, aprovechad para acercaros a la ermita de Santiago, una singular construcción románica del siglo XII en las afueras del pueblo que quedó inacabada pero que tiene unos capiteles preciosos en su portada. La iglesia de San Salvador vale la pena por sus pinturas románicas y por albergar, en la casa parroquial, el singular (y según algunas fuentes, el único) Museo del Órgano.
Turismo activo en la Hoya de Huesca
Además de por sus formaciones rocosas y por las múltiples rutas senderistas y de escalada que hay, la zona de la Hoya de Huesca es conocida por su gran oferta de deportes de aventura. El río Gállego, que la cruza parcialmente, es una gran fuente de diversión y ejercicio, además de un lugar increíblemente fotogénico.
¿Cómo llegar al Reino de los Mallos?
- En coche, desde Huesca y cruzando Ayerbe, se llega tanto a Riglos como a Agüero por la carretera A-132 y por varias carreteras locales. Está muy bien señalizado, así que no hay pérdida 🙂
Tienes más información en este post sobre los Mallos de Riglos de En el mundo perdido
¿Os animáis a explorar la zona?
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23 comentarios en “Visita al Reino de los Mallos, una maravilla natural de Aragón”
Me encanta la claridad y la forma tan atractiva con que presentas mi tierra en todo su esplendor. Muy bien documentado el artículo.
Por cierto, te amplío el asunto del «Reino de los Mallos». Básicamente es una marca turística. Pero parece ser que se basa en una historia real (en su doble sentido): en Aragón reinaron sucesivamente tres hermanos. El primero fue Pedro I, conquistador de Huesca en 1096. A su muerte sin descendencia, subió al trono su hermano Alfonso I el Batallador, conquistador de Zaragoza en 1118, el cual dio la zona de los mallos a la reina doña Berta como feudo durante un año. ¿Y por qué? para poder comprobar que no había quedado embarazada de su marido antes de que aquél muriese (podría nacer un rey póstumo, como ocurrió con Alfonso XIII muchos siglos después). Por lo visto era una costumbre de la época. Pasado el año, y comprobado que no había niño, ella volvió con su familia (parece ser que era del norte de Italia, pero no sabemos nada más de ella). La zona se llamó popularmente el Reino de los Mallos porque perteneció a una reina, pero no lo era realmente. No había más reino que Aragón. Por acabar el culebrón familiar, digamos que Alfonso tampoco tuvo hijos (a pesar de su tormentoso matrimonio con Doña Urraca, reina de León), por lo que llamaron para reinar al tercer hermano, Ramiro II, famoso por ser el protagonista de la Campana de Huesca (ésa sí es leyenda) y por ser padre de la reina Doña Petronila. Pedro está enterrado en el monasterio de San Juan de la Peña, mientras que Alfonso y Ramiro están en el monasterio de San Pedro el Viejo de Huesca.
Saludos y enhorabuena.
Menudo culebrón!!!! He encontrado poquita información sobre el tema del porque del «Reino de los Mallos» pero por lo que cuentas hay toda una historia detrás… Vaya tela con nuestros antepasados medievales 😉
Me alegro de que te guste el post… Soy una enamorada de Huesca, me encanta… A ver si este año me puedo acercar más veces!
Un abrazo
Pues cuéntame qué sitios conoces, que te recomendaré otros. Sin duda, una de las provincias más bonitas de España (iba a decir la más bonita, pero me he mordido la lengua…)
Si dices lo de más bonita, te secundo! A mis padres les gustaba mucho llevarnos a mi hermana y a mi de pequeñas a la zona de Ordesa, Panticosa y demás… Y por mi cuenta he estado en Monzón y la comarca de la Litera, y también en Huesca, Loarre, los mallos y San Juan de la Peña (post pendiente… que caerá en breve) 😉
Tienes que ir a Alquézar y la sierra de Guara, a Jaca, a Bielsa para el carnaval, al cañón de Añisclo, al valle de Pineta, a Hecho y Ansó y a Graus. Eso es lo principal. Y cuando acabes con Huesca, empezamos con Zaragoza y después con Teruel.
Vamos, que tengo «deberes» para rato! 😉 La sierra de Guara está en mi lista de «pendientes» desde hace tiempo. Igual que Ansó y Graus… Y qué te voy a contar de Zaragoza y Teruel, que ahí están… y todavía no he podido verlas…
Un abrazo
verticalidad absoluta me encanta, echo de menos el poder decirte me gusta con el perfil de wordpress pero vamos te llevas un gallifante me gusta con el de facebool
Yo también hecho de menos el perfil de wordpress… aish… Mil gracias por tus palabras! Bloggers como tu son los que me impulsan cada día a compartir mis experiencias viajeras 😉
Un abrazo enoooorme
These are some of the landscapes in Spain that a lot of people outside of Europe don’t know much about. You showcase them very well. Those rock formations are truly impressive. If I were in that church’s bell tower, I don’t think I can sleep very well. 🙂
I guess that’s why I keep blogging about out-of-the-beaten-track places in Spain… We’ve got so much more than Barcelona and Madrid, the country’s got a lot to offer and I guess most tourists should venture out of the cities to explore our lush and beautiful countryside…
Those rock formations were sooo impressive! I don’t think I could live under their shadow. I’d be too scared of being crushed!
Thanks for commenting! 😉
¡No conocía este lugar! Parece muy bonito, aunque tengo que decir que en esos pueblos debe dar un poco de miedo vivir… yo estaría pensando todo el día que los pedruscos se van a venir abajo :S
Gracias Estela! Realmente, el lugar es precioooooso… pero pienso como tú, no se yo si podría vivir con un pedrusco a mi espalda… 😉
Fotazas!
Pasé por la zona hace 7 años y me encantó!
Gracias Biel! Me gustó muchísimo la zona y creo que hay que dar más a conocer rincones como estos… Son ideales para desconectar de la rutina diaria y para descubrir lugares nuevos dentro del país (además de para impulsar la economía y el turismo local) 🙂
Exacto. A veces en los lugares con menos fama se disfruta y se desconecta mucho más. Y por inesperado, si te gustan vuelves más que encantado con la experiencia.
😉
Si es que tenemos rincones preciosos cerca de casa, pero no se porqué nos empeñamos siempre en largarnos muy lejos. Y este no lo conocemos.
Un fuerte abrazo y buen post como siempre!
Muchas gracias familia! 😉 La próxima vez que volváis a la península con algo más de tiempo, os recomiendo muchísimo Huesca… está llena de encantos!
Un abrazo, guapos!
Pues la foto esta de Agüero con los mallos de fondo es una pasada.
Una zona poco conocida pero por lo que se ve muy bonita.
Un saludo 😉
Una zona preciosísima, Helena! Si vas, no te arrepentirás 😉
Ah, y gracias por el piropo fotográfico!
Un abrazo